Las personas que hacen dietas para adelgazar, leídas en revistas o contadas por otros cometen un grave error, ya que sólo 2 de cada 10 personas que se auto-prescriben a un régimen alimenticio logran resultados favorables.

Si las dietas no son supervisadas por un especialista, el cuerpo tarde o temprano recupera los kilos perdidos. El 73 por ciento de las mujeres que inician un control en su alimentación lo hacen por estética; mientras que los hombres lo hacen por salud.

Realizar una dieta sin la supervisión de un especialista tiene graves consecuencias, ya que no se logra reducir la talla por mucho tiempo y el organismo podría sufrir cambios bruscos en la alimentación. El riñón es el órgano más afectado.

Debes considerar estos aspectos antes de comenzar una de tantas dietas que puedes encontrar en revistas o la Internet.
 

• La ingestión de diuréticos puede llegar a ocasionar problemas de riñón y deshidratación. Es un adelgazamiento ilusorio, porque sólo hay una pérdida de agua y sales que se recuperan en cuanto cesa la administración del diurético.

 

• Las dietas exprés son dietas generales, lo cual no garantiza que vayas a perder cierta cantidad de kilos, aunque generalmente están hechas con pocas calorías, no siempre son efectivas sobre todo para aquellas personas que tienen problemas metabólicos.

 

• La pérdida rápida, cuanto más rápida sea la pérdida de peso, mayor es el riesgo para la salud y la recuperación del peso será inmediata cuando se abandone la dieta.

 

• Uno de los contras que más deberían importarnos, si bien la báscula puede hacernos ver una gran diferencia en nuestra pérdida de peso, la gran mayoría es de músculo, así que en tu ropa no habrá una diferencia notoria.

 

• Producen el efecto “yo-yo”, perder y recuperar peso continuamente provoca una liberación excesiva de lipoproteínas lipasa que estimulan el almacenamiento de grasa.

 

• Provocan monotonía y aburrimiento, lo cual lleva al abandono: cuanto más restrictivo y poco variado sea un régimen, más riesgo hay de abandonarlo o de darse “atracones” y sucumbir a las tentaciones.

 

• En las dietas hipocalóricas el sujeto reduce su gasto energético en tres aspectos: disminuye el metabolismo basal, baja el costo energético de la actividad física. Estos tres factores provocan que, al cabo de un tiempo, la pérdida de peso se ralentice e incluso se paralice.

 

Por supuesto, también existen efectos positivos que hay que reconocer, contáctanos para obtener la dieta que más se ajusta a tu metabolismo y ritmo de vida.